domingo, 13 de octubre de 2019

Discurso del Método P1, Prr. 1-5



Discurso del Método P1, Prr. 1-5

El buen sentido es la cosa mejor repartida del mundo, pues cada cual piensa que posee tan buena provisión de él, que aun los más descontentadizos respecto a cualquier otra cosa no suelen apetecer más del que ya tienen. En lo cual no es verosímil que todos se engañen, sino que más bien esto demuestra que la facultad de juzgar y distinguir lo verdadero de lo falso, que es propiamente lo que llamamos buen sentido o razón, es naturalmente igual en todos los hombres; y, por lo tanto, que la diversidad de nuestras opiniones no proviene de que unos sean. más razonables que otros, sino tan sólo de que dirigimos nuestros pensamientos por derroteros diferentes y no consideramos las mismas cosas. No basta, en efecto, tener el ingenio bueno; lo principal es aplicarlo bien. Las almas más grandes son capaces de los mayores vicios, como de las mayores virtudes; y los que andan muy despacio pueden llegar mucho más lejos, si van siempre por el camino recto, que los que corren, pero se apartan de él.

Por mi parte, nunca he creído que mi ingenio fuese más perfecto que los ingenios comunes; hasta he deseado muchas veces tener el pensamiento tan rápido, o la imaginación tan nítida y distinta, o la memoria tan amplia y presente como algunos otros. Y no sé de otras cualidades sino ésas, que contribuyen a la perfección del ingenio; pues en lo que toca a la razón o al sentido; siendo, como es, la única cosa que nos hace hombres y nos distingue de los animales, quiero creer que está entera en cada uno de nosotros y seguir en esto la común opinión de los filósofos, que dicen que el más o el menos es sólo de los accidentes, mas no de las formas o naturalezas de los individuos de una misma especie.

Pero, sin temor, puedo decir que creo que fue una gran ventura para el haberme metido desde joven por ciertos caminos, que me han llevado a ciertas consideraciones y máximas, con las que he formado un método, en el cual paréceme que tengo un medio para aumentar gradualmente mi conocimiento y elevarlo poco a poco hasta el punto más alto a que la mediocridad de mi ingenio y la brevedad de mi vida puedan permitirme llegar. Pues tales frutos he recogido ya de ese método que aun cuando en el juicio que sobre mí mismo hago procuro siempre inclinarme del lado de la desconfianza mejor que del de la presunción, y aunque al mirar con ánimo filosófico las distintas acciones y empresas de los hombres no hallo casi ninguna que no me parezca vana e inútil, sin embargo, no deja de producir en mí una extremada satisfacción el progreso que pienso haber realizado ya en la investigación de la verdad, y concibo tales esperanzas para el porvenir que si entre las ocupaciones que embargan a los hombres, puramente hombres, hay alguna que sea sólidamente buena e importante, me atrevo a creer que es la que yo he elegido por mía.

Puede ser, no obstante, que me engañe, y acaso lo que me parece oro puro y diamante fino no sea sino un poco de cobre y de vidrio. Sé cuán expuestos estamos a equivocarnos cuando de nosotros mismos se trata, y cuán sospechosos deben sernos también los juicios de los amigos que se pronuncian en nuestro favor. Pero me gustaría dar a conocer en el presente discurso los caminos que he seguido y representar en ellos mi vida como en un cuadro, para que cada cual pueda formar su juicio, y así, tomando luego conocimiento, por el rumor público, de las opiniones emitidas, sea éste un nuevo medio de instruirme, que añadiré a los que acostumbro emplear.

Mi propósito, pues, no es el de enseñar aquí el método que cada cual ha de seguir para dirigir bien su razón, sino sólo exponer .el modo como yo he procurado conducir la mía. Los que se meten a dar preceptos deben estimarse más hábiles que aquellos a quienes los dan, y son muy censurables si faltan en la cosa más mínima. Pero como yo no propongo este escrito sino a modo de historia o, si preferís, de fábula, en la que, entre ejemplos que podrán imitarse, irán acaso otros también que con razón no serán seguidos, espero que tendrá utilidad para algunos, sin ser nocivo para nadie, y que todo el mundo agradecerá mi franqueza.

Cuestiones

  1. Razona si las implicaciones o consecuencias d de la siguiente afirmación son sensatas :
    la facultad de juzgar y distinguir lo verdadero de lo falso, ,,, es naturalmente igual en todos los hombres;
    todos los hombres que aplican bien su ingenio deberían llegar a las mismas conclusiones.
    Sólo existe una verdad común a todos los seres humanos.
    La diversidad de opiniones puede ser tolerada pero es un error científico.
    Los prejuicios son inevitables
    La educación debe ser plural.
    Existen muchos tipos de costumbres pero debería existir un código moral y legal para todo el mundo.
    Solo debería existir una religión verdadera.
  2. ¿Qué puede significar aplicar bien el ingenio?
  3. ¿Utiliza en el primer párrafo la primera persona de los verbos que emplea para establecer afirmaciones? ¿Qué puede significar esta opción de estilo?
  4. Explica el significado de los términos buen sentido, aplicar bien, en el texto.
  5. ¿En qué persona están empleados los verbos del segundo párrafo y siguientes?
  6. Explica el significado del término ingenio, y mi, método en el texto.
  7. Si el buen sentido o razón está en todos y Descartes pretende mostrarnos el método por el que se ha conducido su razón ¿demos llegar todos a la misma conclusión que Descartes?
  8. ¿Cuál es el propósito de Descartes? ¿Qué temores manifiesta Descartes sobre su propósito?
  9. Sintetiza las ideas del texto mostrando en tu resumen la estructura argumentativa o expositiva del texto.

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